Los últimos días de noviembre el Grupo de Trabajo del Foro de San Pablo se ha pronunciado contra el exabrupto de Mauricio Macri, presidente electo de la Argentina, quien amenaza con solicitar la exclusión de Venezuela del MERCOSUR por “antidemocrática”. Desopilante, pero es de conocimiento público.
No cabe duda -atendiendo a conductas y manifestaciones precedentes- de que esta maniobra publicitaria -replicada por la prensa internacional- apunta a restar legitimidad a las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre en la República Bolivariana. Es, también y aunque nos pese como argentinos, una injerencia en los asuntos internos de un país hermano, consistente con el alineamiento a la política de Washington que Mauricio Macri pretende instalar en los próximos cuatro años.
Difundimos a continuación, en forma textual, el escrito del Foro de San Pablo.
“DECLARACIÓN SOBRE EL ANUNCIO DE MAURICIO MACRI PIDIENDO SANCIONES CONTRA VENEZUELA EN EL MERCOSUR
“El Grupo de Trabajo del Foro de São Paulo, reunido en la ciudad de Quito el 26 y 27 de noviembre de 2015, rechaza las declaraciones del presidente electo de Argentina, Mauricio Macri, quien pide sanciones contra Venezuela en el MERCOSUR.
“!1) Es pública y notoria la trayectoria democrática de la República Bolivariana de Venezuela: se han llevado a cabo innumerables elecciones y consultas populares -como las reformas constitucionales, elecciones presidenciales, de gobernadores y municipales, referéndum revocatorio- que fueron evaluadas como transparentes y consideradas como las mejores del mundo por varias instituciones internacionales, incluyendo la estadounidense Fundación Carter.
“2) Consideramos que con esta postura se pretende incidir sobre las elecciones legislativas previstas para el próximo 6 de diciembre en Venezuela, lo cual representa una injerencia indebida en la campaña electoral y un irrespeto a la soberanía del pueblo venezolano, poniendo claramente de manifiesto una predisposición contraria a la Revolución Bolivariana y al gobierno del presidente Nicolás Maduro, alineada con la estrategia de desestabilización que se impulsa desde Washington.
“3) La aplicación de la «Cláusula Democrática» del MERCOSUR refiere a las violaciones a la estabilidad institucional y a los golpes de Estado en los países miembros y no a la intromisión en sus asuntos internos. En este caso, los verdaderos golpistas son los aliados políticos de Mauricio Macri, varios de ellos debidamente procesados y condenados por los tribunales ordinarios venezolanos.
“4) El siglo XXI en nuestra región latinoamericana y caribeña está marcado por el espíritu de unidad e integración, con la construcción y fortalecimiento de instituciones como CELAC, UNASUR, ALBA, MERCOSUR, SICA y CARICOM espacios para el encuentro político, solución pacífica de controversias y la cooperación solidaria para alcanzar el desarrollo con justicia social.
“Aspiramos a que los jefes y jefas de Estado del MERCOSUR se pronuncien una vez más a favor de la integración regional y en defensa de la soberanía y autodeterminación de los pueblos.”